P.N. de Cornalvo y Sierra de Montánchez

⇒ Punto de encuentro: 
Plaza de Moncloa (Madrid) frente al Cuartel General del Ejército del Aire
⇒ Hora de salida: 8:00 h.
⇒ Hora de regreso: 22:00 h. (aprox.)

Los encinares y dehesas del Parque Natural de Cornalvo se extienden por una superficie de 11.600 hectáreas, ubicándose muy cerca de la ciudad de Mérida. Situado a mitad de camino entre las vegas del Guadiana y las Sierras de San Pedro y Montánchez, su suave relieve, únicamente interrumpido por las formaciones de las Sierras Bermeja y del Moro, conforman un ancho corredor natural que conecta ambas regiones. Dada su clasificación como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y Lugar de Importancia Comunitaria (LIC), el Parque Natural de Cornalvo es además un espacio incluido en la Red Natura 2000.

Para conocer mejor el parque realizaremos una sencilla ruta a pie de unos 9 kilómetros atravesando por algunos de sus mejores ecosistemas, incluyendo el embalse de Cornalvo, donde tendremos oportunidad de contemplar su presa, declarada Monumento Nacional por ser una de las obras hidráulicas romanas mejor conservada.

Durante esta ruta serán las grandes rapaces nuestro principal objetivo, donde además de la presencia de las grandes necrófagas como los buitres negro y leonado, podríamos observar las águilas perdiceras y reales. En estas fechas habrán llegado ya los primeros alimoches y cigüeñas negras, las cuales son a veces observadas pescando o descansando en las orillas de los ríos y arroyos de la comarca, además del propio embalse.

Esta excursión se completará con una fugaz visita al puente romano de Mérida, donde crían multitud de vencejos reales y pálidos, y el imprescindible encuentro con la Sierra de Montánchez, un conjunto se sierras escarpadas que emergen desde la llanura alcanzando los casi mil metros de altitud. Este contraste abrupto entre el llano y la sierra confiere a este paraje una muy particular fisionomía, donde las laderas de solana y umbría aparecen bien delimitadas gracias a su característica vegetación mediterránea. Aquí podremos observar aves de ambientes rocosos como la collalba negra, el avión roquero o el roquero solitario, sin descartar mirar al cielo en busca de águilas y milanos. De hecho son estas buenas fechas para toparnos con los primeros milanos negros y águilas culebreras que estarán llegando a Europa procedentes de sus cuarteles de invernada africanos.